Procesos de coagulación y floculación utilizando polielectrolitos

En el mundo del tratamiento de agua y aguas residuales, desde las grandes plantas municipales de tratamiento de aguas residuales hasta las instalaciones industriales, existe un desafío constante: ¿cómo capturar las diminutas e invisibles partículas suspendidas que flotan en el agua y producir agua cristalina y libre de contaminantes? La respuesta reside en un proceso crucial llamado  coagulación y floculación  , y en el corazón de este mundo moderno reside una  potente clase de sustancias químicas llamadas polielectrolitos .

Este artículo investiga exhaustivamente este proceso y describe el papel de los polielectrolitos como el factor más eficaz en la formación de flóculos pesados ​​y separables.

Problemas principales: partículas estables y partículas suspendidas

Las partículas sólidas suspendidas en el agua, como la arcilla, la materia orgánica, las bacterias y los contaminantes industriales, se repelen entre sí debido a su carga superficial negativa. Esta repulsión electrostática impide que se adhieran, lo que les permite permanecer suspendidas de forma estable en el agua durante largos periodos. Estas partículas son tan pequeñas (coloidales) que no pueden separarse fácilmente mediante métodos de sedimentación simples. Aquí es donde entran en juego los procesos de coagulación y floculación.

Diferencia entre coagulación y floculación

Aunque estos dos términos a menudo se usan indistintamente, son etapas diferentes del mismo proceso:

  1. Coagulación:  Este es el primer paso. Durante este paso, se añade al agua una sustancia química llamada  coagulante . Esta sustancia, generalmente con carga positiva (como el alumbre o un polielectrolito catiónico), neutraliza las cargas superficiales negativas de las partículas. Al desaparecer las fuerzas repulsivas, las partículas se vuelven inestables y pueden acercarse.

  2. Floculación:  La segunda etapa sigue al proceso de coagulación. En ella, se añade otra sustancia llamada  floculante . Los polielectrolitos funcionan mejor en esta fase. Estos polímeros de cadena larga actúan como puentes moleculares, uniendo partículas pequeñas e inestables. Al envolver las partículas, forman masas grandes, duras y pesadas llamadas  flóculos  . Estos flóculos son lo suficientemente grandes y pesados ​​como para separarse fácilmente del agua mediante sedimentación o flotación.

Polielectrolitos: Los héroes anónimos del proceso

Los polielectrolitos son polímeros sintéticos o naturales solubles en agua que presentan grupos funcionales cargados en sus cadenas. Esta carga es la que los hace tan eficientes.

Según la carga, los polielectrolitos se pueden clasificar en:

  1. Polielectrolitos catiónicos:  Tienen carga positiva. Estos electrolitos son ideales para neutralizar partículas con carga negativa, el tipo más común. Pueden actuar tanto como coagulantes (neutralizando cargas) como floculantes (cubriendo brechas de carga). Son especialmente comunes en el tratamiento de aguas residuales municipales e industriales con alto contenido orgánico.

  2. Polielectrolitos aniónicos:  Tienen carga negativa. Estos polielectrolitos se utilizan típicamente cuando las partículas en suspensión tienen carga positiva o en combinación con coagulantes metálicos como el alumbre, que forman complejos con carga positiva. Se utilizan principalmente como floculantes.

  3. Polielectrolitos no iónicos:  No tienen carga. Su mecanismo de acción se basa principalmente en la formación de puentes físicos y la adsorción superficial. Son eficaces cuando la carga superficial de las partículas es mínima o cuando los cambios de pH afectan negativamente el rendimiento de los materiales cargados.

En comparación con los coagulantes tradicionales como el alumbre, las ventajas de utilizar polielectrolitos son las siguientes:

  • Más eficientes:  Forman coágulos sanguíneos más grandes, más fuertes y más rápidos.

  • Menor consumo:  La dosis de polielectrolito requerida es mucho menor que la de los coagulantes minerales (normalmente en el rango de ppm).

  • Menos lodos: Como  se añaden menos productos químicos , la cantidad de lodos generados se reduce significativamente, disminuyendo así sus costos de eliminación y gestión.

  • Tasa de sedimentación:  Los flóculos más pesados ​​se sedimentan más rápido, lo que reduce el tamaño del tanque de sedimentación y ahorra en la inversión inicial.

  • Flexibilidad: Al seleccionar el tipo y el peso molecular adecuados  , se puede optimizar para distintos tipos de agua y aguas residuales.

Los polielectrolitos se utilizan ampliamente en diversas industrias.

  • Purificación de agua potable:  eliminación de turbidez, color y materia orgánica.

  • Tratamiento de aguas residuales municipales:  separación de lodos activados en tanques de floculación secundaria.

  • Industrias mineras y de procesamiento:  espesamiento y deshidratación de relaves.

  • Industria de alimentos y bebidas:  se utiliza para separar partículas suspendidas en aguas residuales industriales.

  • Industria papelera:  circulación de agua y retención de fibras.

  • Perforación de petróleo y gas:  se utiliza para el control de la viscosidad y la separación de partículas del lodo de perforación.

Puntos clave para optimizar el uso del polielectrolito

El uso eficaz de polielectrolitos requiere prestar atención a:

  • Prueba de vaso de precipitados: Antes de tomar la decisión final, se debe realizar  una prueba de vaso de precipitados para determinar el tipo exacto de polielectrolito, la dosis óptima y el punto de inyección. Esta prueba simula condiciones reales a pequeña escala.

  • Preparación de la solución madre:  Los polielectrolitos deben prepararse adecuadamente utilizando equipos especializados (por ejemplo, peletizadoras) para evitar la formación de «ojos de pescado» y lograr la máxima eficiencia.

  • Punto de inyección y agitación:  La intensidad y la duración de la agitación son fundamentales. Una agitación rápida ayuda a distribuir uniformemente el coagulante, mientras que una agitación lenta facilita su crecimiento sin fragmentarse.

en conclusión

La coagulación y la floculación son procesos fisicoquímicos esenciales en el tratamiento de agua y aguas residuales; sin ellos, es imposible alcanzar los estándares de calidad.  Los polielectrolitos  , con sus propiedades inteligentes, desempeñan un papel fundamental en este proceso. Al neutralizar cargas y crear puentes entre partículas, transforman partículas pequeñas e indeseables en flóculos fácilmente manejables. Seleccionar el tipo de material adecuado y optimizar su utilización no solo garantiza la calidad del producto final, sino que también permite ahorros significativos en costos operativos, consumo energético y gestión de lodos. Por lo tanto, un profundo conocimiento de este proceso y los factores que lo influyen es esencial para todo ingeniero y experto en los campos del agua y el medio ambiente.